Mirella García Lucas
Pocas cosas hay más temibles para un estudiantes que los exámenes finales, especialmente en un nivel universitario, cuando todas las pruebas- que suelen abarcar una cantidad considerable de materia – se concentran en un mismo periodo de tiempo, de manera que un estudiante puede tener hasta 5 exámenes o más en una sola semana.
Para preparar este periodo de evaluación, es fundamental la organización del tiempo de estudio, como ya hemos mostrado en entradas anteriores; pero también es importante gestionar los exámenes mismos, saber en qué consistirán y cómo podemos enfrentarnos a ellos.
Cómo planificar un examen
Aunque parezca una cosa obvia, hay que dejar claro que para saber cómo planificar la evaluación de una asignatura, lo primero que debemos saber es cuál es el sistema de evaluación (tipo de pruebas, calendario, criterios y porcentajes de evaluación, etc.). Una vez conocido el sistema, es fundamental tener muy claros y organizados los contenidos susceptibles de entrar en el examen, y la manera en la que serán preguntados (de hecho, este punto lo desarrollaremos más adelante cuando hablemos de los tipos de examen).
Una vez tengamos claras estas dos cuestiones, es asimismo necesario tener presentes los materiales que utilizaremos para estudiar la materia: ¿Tenemos los apuntes completos? ¿Necesito algún tipo de información complementaria? ¿Dónde puedo encontrar esa información? Estas son algunas de las preguntas que sería conveniente hacerse antes de empezar a estudiar para un examen.
Y una vez hemos estudiado, es fundamental también comprobar que los contenidos que se han estudiado se han asimilado correctamente. ¿Cómo? Depende de la materia y de tu método de estudio: puedes hacer simulacros de examen, volver a hacer ejercicios ya corregidos y comprobar las respuestas, recitar contenidos oralmente, hacer tests en línea, etc. Pero lo que es muy importante es comprender que el hecho de estudiar siempre debe llevar incorporada la fase de comprobar los contenidos trabajados anteriormente. Para organizarte esta fase, puedes utilizar un calendario o plantilla como esta:

Tipos de examen que puedes encontrar
Como hemos comentado anteriormente es fundamental saber cómo va a ser el tipo de prueba o examen ya que no es lo mismo responder a un examen tipo test que tener que desarrollar por escrito todo un tema, o resolver una serie de problemas matemáticos. Elena Cano, en Organizarse mejor (Graó, 2010) proporciona el siguiente esquema de elementos que deben tenerse en cuenta en función del tipo de examen:

CANO GARCÍA, E.; RUBIO CARBÓ, A.; SERRAT ANTOLÍ, N. Organizarse mejor. Habilidades, estrategias y hábitos de estudio. Barcelona: Editorial Graó, 2010.
University of York. Preparing for tests and exams: http://lss.info.yorku.ca/resources/preparing-for-tests-and-exams/#Ok
